lunes, julio 16, 2012

12º de beso

Dame tu boca en cuanto puedas. Me urge. Te veo disfrutar esa copa de vino y pienso que la saborearé cuando tus labios tan carnosos y cálidos acaricien la mía, ansiosa de amor. Sé que no será igual, sé que será aún mejor. Le añadirás el peso del roble de tu experiencia y la frescura y exotismo de los frutos rojos de tu pasión. El sensual calor del susurro de tu aliento dejará, en esta amalgama de cosquillas impacientes, ese retrogusto que no podré olvidar jamás.

2 comentarios:

  1. el sabor afrutado lo veo y huelo el color grosella de tú vino blanco! Manucha

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  2. Me gusta el tacto de tu comentario Manucha.

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