lunes, abril 11, 2011

Lámpara voladora

¡Joder! ¡Qué fea es la puta lámpara! No sé ni porqué ni cómo llegó ahí, lo que sí sé es cuándo y cómo va a salir por la ventana. Incluso puedo calcular con modesta precisión la velocidad con la que atravesará el espacio que separará mi mano y el jardín del vecino. Pues más o menos a toda hostia, o más. El hombre tiene ya una cafetera, que no iba mal pero con la que me abrasé un dedo un día aciago; un despertador, como no; un disco de Phil Collins, que no sé quién cojones me regaló, bueno sí; y un cuadro de Jesucristo de esos que se le abren y cierran los ojos según te mueves frente a él, que compré a propósito para ver si batía mi record de lanzamiento a mala hostia. Lo cierto es que me llevo bien con mi vecino, yo descargo mi carga de violencia e intolerancia y él sacia su síndrome de Diógenes con un siempre sincero, “¡¡Gracias, me viene de lujo!!”.

4 comentarios:

  1. Phil Collins records allegedly have that effect on people - I have no experience myself however. What is certain though is that when you finally throw that damn lamp out, your neighbour will know that there is something In The Air Tonight.......Ped.

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  2. hahahahhahahahhahahahhahahahahahaaahahhaha

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  3. A eso se le puede llamar simbiosis, no?... O es fotosintesis? Ejke soy de letras, coño!

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  4. No. Se llama fimosis. Ay los de letras...!

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